Hoy en día es clave diseñar y planificar nuestras redes sociales educativas debido a la globalidad de la información, la dispersión de intereses y el sumidero de tiempo que puede llevar si no se establece un plan de comunicación en un centro educativo.
Si se gestionan y planifican adecuadamente, las redes sociales pueden ser un estupendo canal de comunicación en el ámbito educativo. Medios no nos faltan en los Centros Educativos.
Partir del entorno educativo en este tema, siempre aparecerá la palabra “necesidad”, “formación” y, sobre todo, cooperación. (No es una moda ni un experimento).
Un plan de comunicación externo parte de la necesidad de responder a nuestros destinatarios; en este caso toda la comunidad educativa, puesto que partimos de un todo, de un espacio de encuentro con la finalidad de compartir experiencias y promover el mantenimiento del contacto con las redes sociales educativas, no lo olvidemos.
Desde el punto de vista del centro educativo, debe formarse suidentidad digital, donde se incluye el uso de las Tic en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Si por identidad digital, hablamos de tener una página web del Centro, y unos cuantos blogs de algunos maestros, tenemos un empiece pero no nos engañemos. Creamosespacios privadosporque lo verán los que siempre acuden a las tutorías, los que utilizan internet para saber del Centro, el tutor que maneja las redes, etc… ( ¿y los que realmente lo necesitan para orientarles en el proceso de enseñanza-aprendizaje?)
Un espacio público abierto necesita de horas de trabajo, de motivación, de ganas, de formación… Es al principio, porque una vez instaurado, va rodado.
La privacidad en internet, lo que se expone o no, si son buenas o malas, etc… Igualmente era años antes los miedos al uso del ordenador, los móviles, las tablets… todo dispositivo debe ser controlado, orientado y canalizado, y cuando más público lo vea, más transparente será. (Paradógicamente se habla de abrir la escuela a la comunidad educativa pero en estos temas se cierra el candado no solo por los padres sino el mismo profesorado)
Un espacio público abierto necesita de horas de trabajo, de motivación, de ganas, de formación… Es al principio, porque una vez instaurado, va rodado.
Al profesorado,incentivar el uso de esta herramientaes un factor determinante tanto dentro como fuera del aula. Es preciso considerar la inclusión en la formación reglada de materias sobre el buen uso de estas herramientas.
Con respecto al ámbito familiar, los padres ven la figura del profesor mucho más cercana al alumno, conun contacto y seguimiento del alumno más directo y personalizado. Se debe producir un efecto contagio, tanto en los contenidos que se tratan durante el curso, la atención personalizada que complementa a la tutoría, como en otras actividades, etc..
Los alumnos verán en este tipo de actividades a través de las redes sociales una manera decrear su propio conocimiento y ampliarlo, compartirlo, crearán sus propios objetivos y utilizarán los ordenadores, móviles, tablets, etc. desde este prisma de actuación.
Sí es cierto que si no han funcionado los canales de comunicación tradicionales, las redes sociales por internet suenan a risa. Por ello, un plan de comunicación parte de un “público” que previamente se ha trabajado.
Toda la comunidad educativa es susceptible de este plan, desde completar el trabajo de aula como el anuncio de una actividad cultural por parte de un ayuntamiento; son pequeños motivos para construir una red.
Partiendo de la comunidad educativa como público destinatario, los canales de comunicación parten de su realidad cotidiana, previo estudio de nuestra identidad digital, sin marginar a los que no tienen acceso a estas redes. Ya se buscará la forma de participar en ella.
Para concluir, si nos reducimos a” pequeñas islas” de participación, a la labor de unos cuantos profesores, la participación de unos cuantos padres y a la utilización de herramientas informáticas desconocidas, será otro canal de comunicación “marginado” que sólo atenderá a los que van bien en clase, y los que realmente lo necesitan, a utilizar las nuevas tecnologías como herramienta lúdica y desconectada de la escuela.
Por ello, un plan de comunicación externo surge de las «raíces» de un Proyecto de Centro que se caracteriza por su talante, abierto, participativo y comunicador que atiende a todos los sectores de la Comunidad Educativa, y pone los medios necesarios para facilitar esta tarea.